La Bien Querida cerró la gira de su álbum más sobresaliente el pasado viernes en Madrid. Premeditación, Nocturnidad y Alevosía pasará a los anales de la historia como uno de los discos más redondos de nuestra música reciente. Pese a ello la despedida de este álbum pasará al olvido más pronto que tarde.
Un sonido deficientísimo, entorpeció el paso de las canciones por la Joy Eslava en el ciclo de Pop&Dance. Momentos que previamente se posicionaban como dos de los más épicos de la noche, llegaron a resultar tristemente los más incómodos. Hacemos referencia a dos de los grandes temas de ese gran trabajo: “Alta tensión” y “Ojala estuvieras muerto”.
Emblemas como “Hoy”, “Sentido Común”, “De momento abril” o “9.6” sedujeron al público como sus más reconocidos hits. “Poderes extraños”, “Disimulando”, “Música contemporánea” o “Muero de amor” fueron otras de las que cerraron un setlist que se presenció como un escaso espectáculo debido a la brevedad del mismo que superó por poco la hora de cancionero.
Abandonó el escenario, celebró su cumpleaños y se retiró como las folklóricas con un ramo de flores. Un fin de gira sin sorpresas, que se salvó por los momentos acústicos de guitarra y voz donde el sonido, la voz y las letras pasearon con una elegancia y belleza sobresaliente intentando disimular las deficiencias acumuladas.
Fotografías: Manuel Colomé